En México la ocurrencia de sismos es casi diaria, afortunadamente son la gran mayoría de poca magnitud y los daños tanto físicos como personales son mínimos.
En México las construcciones deben de cumplir con las Normas y Reglamentos vigentes, y a consecuencia de los sismos de septiembre de 1985 estas Normas y Reglamentos se modificaron y las construcciones se tuvieron que ejecutar cumpliendo con los lineamientos del nuevo reglamento de construcción, las edificaciones construidas anteriormente se tuvieron que ajustar a las nuevas Normas y Reglamentos.
Estas Normas y Reglamentos son más exigentes en estructuras de edificios destinados a centros recreativos, centros educativos, centros comerciales, centros de trabajo, unidades habitacionales y edificaciones donde la permanencia de seres humanos es cuantiosa.
En ese año de 1985 y después hasta el año 2000, se crearon programas por parte del gobierno federal para rehabilitar las edificaciones públicas sobre todo en el D.F., y proteger las edificaciones de sismos similares o un poco mayores.
Sin embargo en gran parte del territorio mexicano no estamos exentos de que se presente un sismo de mayor magnitud, y tenga consecuencias negativas a las estructuras que se construyeron antes de 1985, y la cuales no han sido rehabilitadas.
Nuestra empresa tiene la experiencia y capacidad para dichas rehabilitaciones de las estructuras y protegerlas ante la ocurrencia de un sismo de gran magnitud, o también reparar los daños causados a la estructura por un sismo.
Tenemos como experiencia la rehabilitación de las estructuras de un edifico colapsado estructuralmente, ubicado en la colonia San Rafael, Centro Ciudad de México, por los sismos ocurridos en septiembre de 1985.
Dicho edificio compuesto por sótano y cuatro niveles y debido a la gravedad de los daños, sobre todo en las columnas de concreto armado, fue diagnosticado por varias dependencias del gobierno federal (PEMEX, SDN, DDF) como pérdida irreparable y se dictamino que debería ser demolido de inmediato, incluso se colocaron sellos en todos los accesos al inmueble.
Después de varias reuniones donde participamos, los propietarios del edifico, funcionarios del gobierno federal, ejecutivos de la aseguradora, y nosotros como empresa candidata para ejecutar el proyecto y la rehabilitación del edificio.
Desarrollamos el proyecto a marchas forzadas y empezamos apuntalar el edificio con cables de acero, vigas y polines de madera, para prevenir derrumbes como los que ya se habían presentado el día del sismo. Después de varios días se revisó nuestro proyecto, y nos autorizaron la licencia de construcción.
El proyecto consistió en construir con concreto y acero, muros de cortante, trabes diagonales, encamisados con perfiles de acero las columnas colapsadas, que se veían aparatosas con el concreto derruido, y el acero de las columnas retorcido, así también la nivelación de losas desniveladas, utilizando para esto gastos hidráulico de 30 toneladas, y algunos otros materiales que se usaron para el fin esperado.
En este año de 1985 rehabilitamos centros escolares en la delegación Xochimilco, con proyectos muy similares al anterior.
Participamos en la rehabilitación preventiva para centros escolares en varias delegaciones del D.D.F., en el año de 1990.
Últimamente en el año 2000 con proyecto ejecutivo para la construcción de la Planta Productora de Semillas del Colegio de Postgraduados, y después de iniciada la obra a sugerencia de la supervisión de la obra y de nosotros, se corrigió el proyecto para proteger las estructuras contra sismos.
Desgraciadamente muchas construcciones privadas en México no se han rehabilitado y podrían estar en riesgo, ya que la memoria es falible y se nos olvida lo que pasamos en México en 1985.